sábado, 28 de noviembre de 2015

~Primer Intento~

Rodeada entre verdes pastos, cubierta del azul infinito del cielo y acunada por los susurros del viento.
Hallada aqui, insignificante ante el universo y diosa griega de la nada.

Perfeccion ansiada esculpida entre sueños... Quebraste mi oxigeno, mutilaste mis alas y silenciaste mis gritos de auxilio.
Instantes efimeros bajo tu merced, cuenta atras para el desenlace y desprendimiento permanente de la subsistencia.


Utensilio de exterminio empuñe,  presion bajo mi muñeca infunde y ...

- Cobarde incluso para acabar conmigo misma... - solloce al compas que mis dedos temblaron, dejando caer de entre ellos, el puñal que sustentaban.


- ¿Que fuerza me paraliza en esta perversa creacion? - grite frustrada hacia el eden.
Recuerdos, cientos de ideas y simbolos, desconcertaron mi razon...


"Tan solo soy una miserable humana que es golpeada y hostilizada, la cual trata de poner punto final a una espeluznante epoca" .L.

jueves, 26 de noviembre de 2015

Juramentos endemoniados (CAT)


Mundo gris que se cierne sobre mí, oscuridad que asesina por momentos y bruma sobre mis parpados que me ciega.

Encerrada y humillada, cárcel de espanto es mi cuerpo. Estupidez acabo por nombrarme y la desdicha, en rodearme.
Estaciones transcurrían sosegadas por la masacre, pálido lienzo de mi silueta fue cubierto por torrentes de sangre y, contusiones dibujaron un mapa de guerra contra mí misma.

Como si de un maleficio se tratase, demencia logro controlarme y al fin, mis emociones dominar.
Amor y odio… Blanco y negro… Cielo y tierra…
Todos ellos contrarios, al tiempo que parejos sobre un mismo espacio.

Entes malvadas emergieron desde las profundidades, tratando de escabullirse entre las grietas de mi tez, insensible concluyo mi esencia y afligido mi semblante.
Cargue con malignos secretos, extrema fue la condena que penitencie en sigilo y mortal fue su martirio.


“Tan solo mantuviste la promesa de verme radiante frente al resto, lo que no conocía… era el alcance de sus consecuencias” .L.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Mi hogar entre tinieblas

Soy originaria del lugar mas tenebroso de este mundo, donde el fuego y la catastrofe, son comunes.

Gritos se suceden, musica alta para evitar oir injurias de los demonios que me persiguen; respiracion y latidos desenfrenados que imploran su rescate.
Paz interrumpida por el odio, masacre que ahoga la bondad... Todo palabras que se asemejan a balas impactando contra mi pecho.



Confusa y desconfiada de todo ser humano... El miedo fue modelandome con astucia segun se avecinaba el cataclismo.
Invisible entre las abarrotadas calles, evitando miradas y ensordeciendo el mundo... Sueño con desaparecer.

Y... Me levanto de nuevo, dia tras dia, desesperanzada, aguardando sin saberlo, mis propios males y concienciandome, a duras penas, de que el drama no perseverara entre estas paredes.

Palabras hirientes callan el sonido del televisor, la guerra bombardea mis oidos, las lagrimas corren rapidas por mis mejillas y reaccionando, arder mi rabia.


-¡Parad...!¡Parad!  ¡¡¡PARAD!!!- Grite al tiempo que engrandecia mi tormento.

"Maldicion, ¿Porque no cesan?"

Voces... Tan solo se escuchan estas, haciendo eco, rebotando y angustiando asi, mi fragil existencia.

lunes, 9 de noviembre de 2015

Andrea: Ganadora de una batalla perdida

Lucía: Caminaba, cabizbaja por aquellos pasillos de los que uno jamas se olvida... Autenticos corredores de muerte y milagros en vida, que angeles y arcangeles resguardan.
En verdad, mi cabeza no estaba preparada para asimilar todo aquello que estaba por llegar y lamentablemente, mi corazon si que lo estaba. Terrible, pero tan real, como la daga invisible que se hallaba resquebrajando mi alma.

Andrea:

- ¿Lucía...? ¿Que narices haces aqui? - pregunto una de las voces que jamas podria olvidar... Vieja conocida a causa de este maldito hospital.

Lucía:

-¿Que que ocurrio? - pregunte con cierto aire ironico, tras esto tome aire y me subi una pernera de los leggings; dejando ver una batalla que estaba librandose entre mi mente y el metal a cada segundo que seguia inhalando aire.

-Cat... Volvio... - suspire con media sonrisa sin sentido y, seguida de una leve pausa continue con mi relato:

- Ana volvio... y, mi cabeza, es un desastre suicida... - hable algo avergonzada mientras retornaba a su lugar mis negras mallas.


Me encontraba incomoda y molesta. Encontrarme aqui de nuevo era como si un preso volviese de nuevo a su celda tras mucho tiempo... y, tan solo quisiera correr, liberandose de las cadenas que lo atan al pasado.

La mirada de Andrea se clavo en mi rostro palido y terriblemente delineado.
Alce mi vista, para a continuacion percatar en sus pupilas una pesadumbre limitada por el tiempo y entonces, comprendi que algo no marchaba bien... algo estaba pasando por su distorsionada cabeza.

Lucía:

- Sucede algo que no sepa, ¿Cierto?- musite temerosa de su respuesta.
Ella aparto su largo cabello hacia un lado, al mismo tiempo que una fingida sonrisa cubrio sus rosados labios.


Andrea:

- Me hicieron algunos analisis...- pauso un largo tiempo, como si tratara de buscar la manera correcta de anunciar una debastadora noticia.
No pude perderme mucho mas entre mis pensamientos, pues ella reanudo su discurso:

Andrea:

-Y..., Lucía...- tomo mis manos con gran firmeza, queriendome consolar de algo que seguramente tambien acabaria con lo poco que quedaba de mi y entonces... :

- No me queda mucho aqui... - Sus penetrantes ojos azules chocaron con mis esmeralda, para simplemente espetar lo que largo tiempo habia aguardado:

- Estoy muriendome Lucía... A punto de llegar, la ultima meta de cualquier ser humano, donde siempre quise estar... En el cementerio.

martes, 3 de noviembre de 2015

Talla: Esqueletica.

No me queria matar, tan solo luchaba por adelgazar y asi matar mi realidad, una silueta gorda que me hacia avergonzar.

"¡No pararas, tan solo una talla mas!"

Rodeada de insultos, a cada vez mas duros y en mi cabeza rondando:

"¿No te ves que a cada comida vas engordando?"

Todas mis pesadillas hechas realidad, en los huesos moria por maldad... ¡Unicamente por escuchar a los demas criticar!

Suicidio, pensamientos convertidos en martirio: 

"¿No te ves hermosa?" "¿Crees ahora que no comer era cosa dificultosa?"

Mente conflictiva, cortadas que me desangraban aun viva y metales que aliviavan mi agonia.
Al espejo mirandome y maldiciendome:

"¡Que asco me das! ¿¡No te ves lo rellena que estas!?"

De seguido llorar, apenas valia para el dolor ahogar, pues tan solo queria de carne forrar, un esqueleto que perdia alma sin cesar.